Volvió a ofrecer su corazón. Regresó en el momento deportivo más complicado de la historia reciente de la institución de Arroyito. Prefirió descartar otras ofertas más convenientes en lo económico y lo deportivo para encabezar dentro de la cancha la patriada del operativo retorno a la primera división.
Esta noche, cuando el capitán canalla Cristian González pise otra vez el césped del Gigante, lo envolverá una ovación desde los cuatro costados. Por supuesto que después el Kily deberá rendir en el partido y hacer pesar toda su jerarquía internacional. Pero nadie podrá decir que la vuelta del referente canalla no es una muestra de fidelidad a la camiseta.
El Kily, que el 4 de agosto pasado cumplió 36 años, iniciará hoy su tercer ciclo con la camiseta de Central. Mucha agua corrió bajo el puente desde aquel 12 de julio de 2009, cuando Central empató 1 a 1 ante Belgrano en Arroyito, en el partido de vuelta de la promoción, donde mantuvo la categoría. Tras esa temporada debió dejar el club por diferencias irreconciliables con el por entonces presidente Horacio Usandizaga. Salió en silencio por la puerta de atrás. Con la tristeza de que sería difícil regresar al club de sus amores. Por eso recaló en San Lorenzo, donde tuvo un torneo aceptable y demostró su jerarquía.
Pero llegó el descenso y cuando algunos quisieron partir y otros prefirieron no venir, el Kily no se borró y aceptó el desafío de darle una mano al club en este presente de la B Nacional.
En su primera etapa en el club debutó con 19 años un 18 de diciembre de 1993, cuando los canallas dirigidos por Vicente Cantatore perdieron 2 a 0 ante Gimnasia, en La Plata. Su segundo ciclo fue desde el Apertura 2006 hasta mediados de 2009, donde Central se mantuvo en primera tras vencer en la promoción a Belgrano. Hoy se escribirá la primera hoja de la nueva historia. Es el atractivo extra que tiene el duelo ante los tucumanos.
Paglialunga: “Llegó el momento de ganar”
“La idea es siempre arriesgar y salir a buscar los partidos. Hay que ganar la mayor cantidad de encuentros para poder ascender”, expresó Mario Paglialunga, el volante con más sacrificio en el equipo de Merlo.
Para Paglialunga está claro que ante los tucumanos llegó “el momento de ganar. Conseguimos dos empates buenos por la calidad de los rivales que enfrentamos (San Martín de San Juan y Belgrano), pero ahora hay que obtener un triunfo para sumar confianza”
El volante auriazul también aceptó que todavía se deben “corregir sincronizaciones en el retroceso”, pero admitió que “con el paso de las prácticas y los partidos iremos encontrando el funcionamiento ideal, ya que algunos compañeros llegaron sobre la hora. Por supuesto que no hay excusas y hay que empezar a ganar. Lo positivo es que mejoramos en Córdoba tras el debut con los sanjuaninos”. Además, valoró “todo lo que puede aportar” el Kily González, tanto “con la pelota” como “ordenando”.
Respecto al rival, Paglialunga indicó: “Es un equipo que trata de jugar bien la pelota. Tiene jugadores que progresan con criterio por los laterales. Igual, lo principal será hacer nuestro juego y así podremos ganar”.
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