El pibe Rafael Marcelo Delgado, 21 años, estuvo en varias oportunidades a punto de debutar en la primera de Central. Por diversos motivos no se le dio. En la más importante de ella, porque sufrió una grave lesión que lo alejó casi un año de las canchas. Pero esta tarde, de la mano del Negro Palma, el pibe tuvo su bautismo de fuego en el Gigante y ante su gente.
Y mejor no podría haber sido. Porque no sólo cumplió con su tarea defensiva, sino que al minuto de juego del complemento y en una de sus primeras trepadas a fondo llegó al gol. Algo así como el sueño del pibe hecho realidad.
Todo arrancó con un ataque que el mismo Chelito comenzó por izquierda, cedió para el kily González -que volvió después de mucho tiempo-, quien alargó para Carrizo, que desbordó y el centro cayó al corazón del área donde estaba Delgado, que la empujó al gol.
Un debut que se demoró pero que llegó con todos los condimentos.
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