La crisis institucional y deportiva de Central no es casualidad. La situación es la lógica consecuencia de una sucesión de errores. Se repitieron apresuramientos, caprichos y dislates, siempre enfundados en un epiléptico marco de excesos. Los duelos de la promoción con Belgrano pusieron al conjunto auriazul al borde mismo del abismo y lo obligaron a caminar durante 180 minutos por la peligrosa cornisa de la permanencia. Sólo siguió de pie por su instinto de supervivencia. Durante los últimos 6 torneos nunca se definió un rumbo futbolístico. Y cuando apareció, el conductor de turno tuvo que apartarse por factores externos. Por eso el promedio seguirá siendo una daga que pondrá al equipo contra el paredón de las exigencias y no le regalará un centímetro de maniobra. Y para evitar seguir por la misma senda es cuestión de repasar los malos pasos para no repetirlos.
La resultante de los últimos 6 torneos) llevó al canalla a la permanencia. Esta historia del promedio arrancó en el Apertura 2006, con Néstor Gorosito. Para ese torneo llegaron Azconzábal, Garcé, Conca, el Kily, Wanchope y Belloso. La cosecha fue de 28 puntos y un 8º lugar. Para el Clausura 2007 se fueron varios (Conca, Coudet, Encina, Fassi, Vitti, Wanchope, Ojeda, Ruben y Villagra), mientras que arribaron el paraguayo Acuña, el colombiano Arrechea y Leonel Ríos. Sumó 24 unidades para redondear 52 en la temporada (los que se van para el promedio actual).
La debacle empezó en el Apertura 2007. Llegaron Arzuaga, Messera, Papa, Eduardo Farías, Seccafien, regresó Vizcarra y llegaron extranjeros que no alcanzaron a jugar: el venezolano Vizcarrondo y uruguayo Martínez. Se fueron Acuña, Arrechea, Garcé, Alemanno, Moreira, Ríos, Andrés Díaz y Di María (vendido a Benfica). Inmerso en una crisis política y económica, Central finalizó en el último puesto con 14 puntos.
Hubo elecciones y asumió Horacio Usandizaga como presidente. Como técnico llegó Leonardo Madelón (las últimas dos fechas del Apertura 2007 y casi todo el Clausura 2008) y los futbolistas Jesús Méndez y Ribonetto. Regresó Fassi y vino un delantero uruguayo que nunca tocó la primera: Maxi Pérez.
A pesar de la buena campaña de Madelón, el DT no siguió y para el Apertura 2008 arregló Pablo Sánchez. Los refuerzos fueron Franzoia, el Equi, Ithurralde, Jorge Núñez y Zarif. Se fueron Cristian Alvarez, Arzuaga, Calgaro, Costa, Damián Díaz, Messera, Papa, Raldes, Imperiale, Belloso y Castellano. Vitamina duró 9 partidos. Fue reemplazado por Gustavo Alfaro, quien hizo una paupérrima campaña: cosechó 8 puntos sobre 42. Y eso que la dirigencia trajo en tiempo y forma los refuerzos: Pablo Alvarez, Choy González, Escobar, Lima e Iván Moreno y Fabianesi.
Un nuevo cambio de DT le abrió las puertas a Merlo en la 5ª fecha del Clausura. En 5 partidos cosechó 10 puntos, vitales para que Central no sufra con el descenso directo. Pero Mostaza adujo diferencias con integrantes del plantel y se fue. Llegó Cuffaro Russo (empate en el Bosque ante el Lobo) y asumió Miguel Russo. En 9 partidos hizo la misma cantidad de triunfos que derrotas y no evitó la promoción. Y al ganarle a Belgrano en Córdoba y empatar en Arroyito, se quedó en primera. Pero otra vez hay cambio de DT y a volver a empezar. Por todo esto no habría que cometer los errores de esta historia reciente.
Datos: Carlos Durhand
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