Kily González: "En Central nadie me tiene que pedir perdón" (LaCapital.com.ar)

Cristian González eligió la mesura para ornamentar su regreso al primer equipo canalla. Después de cuatro meses de ausencia por lesión, decidió separarse de la huella de los desplantes para poder disfrutar de una vuelta madura, sin resentimientos. "Creo que fueron injustos conmigo, no merecía lo que me hicieron pero no guardo rencor. Pasé cosas muy difíciles pero creo que nadie me tiene que pedir perdón", le comentó con su corazón abierto el volante de 34 años a Ovación en la semana previa a su posible retorno.

—Se te nota disfrutando.
—Estoy contento porque no tengo molestias en la rodilla. Me siento bien porque hice un sacrificio muy importante y pasé cosas extrafutbolísticas muy difíciles que me hicieron estabilizar a nivel emocional. Ahora me di cuenta de que en el fútbol como en la vida hay que encontrar un equilibrio.

—¿Notás la manera en que cambió tu imagen ante todos?
—El fútbol es así. El ejemplo más claro es lo que le está pasando a (Miguel Angel) Russo. Hace tres meses tenía que ser el técnico de la selección y hoy lo quieren echar. En el fútbol está todo inventado. Es una cuestión de respeto y hay que ir siempre al frente con la verdad, venga lo que venga.

—¿Cómo hiciste para aguantar todo lo que te pasó?
—La única explicación es que soy de Central. Si no quisiera a este club hubiera dado un paso al costado. Pero el fútbol es una rueda. A veces te toca estar abajo y otras arriba. Hoy puedo disfrutar lo que me pasa porque estoy tranquilo emocionalmente. Por eso en todo este tiempo no entré en conflicto con nadie.

—¿Hay mucha gente que tendría que pedirte perdón?
—Creo que nadie me tiene que pedir perdón. Dios es el único que perdona y nos da lo que nos merecemos en esta vida, no en otra. Lo más importante es que duermo tranquilo.

—¿Sentiste que dudaron de vos?
—No sé. Yo reconozco que a veces puedo venir con los cables pelados, soy muy calentón pero soy buena gente. Los que me conocen, lo saben. El que no me conoce, el que no compartió nunca conmigo un vestuario puede llegar a tildarme de mala leche o vende humo. Pero todo lo que hice y haré por Central, es de corazón. Soy transparente y voy de frente. Por eso hoy no tengo problemas en sentarme a una mesa con cualquiera de los que dudaron de mí y decirnos todo en la cara. No tengo nada que ocultar.

—Casi te rescinden el contrato pero siempre recalcás que no guardás nada de rencor.
—No es bueno guardar rencor. Desgraciadamente creo que fueron injustos conmigo, no merecía lo que me hicieron. Obvio que me dolió lo que pasó, pero siempre me manejo por el buen camino, tratando de no cagar a nadie y de no tranzar por nada. Por eso me jode cuando me cruzo con gente que piensa de otra forma, que me cataloga fácil y que me pone manchas que no merezco.